jueves, 19 de noviembre de 2015

Vuelve

Vuelve a ser silencio en los ratos, en la muerte, en los siglos, en los orígenes de las vidas que por descuido o intención, perdimos juntos. Te lo agradecería, cariño, de la forma que solo tú conoces. Pero por favor, vuelve. 
Vuelve sin saber que existo, sin decirme a dónde irás para perderte un poco el rastro. Pero no, no lo tomes a mal, es por el bien de ambos. Y esto es lo último que quiero pedirte: que vuelvas, que regreses en un intento de exilio fracasado, para saber que hicimos lo correcto, para encararle a tus fantasmas y aceptar, después de tanto, que en verdad has vuelto.
Vuelve sin aviso, sin preludio de que vendrás para animar un poco mis ganas, para avivar de nuevo los hechos. Vuelve para sanar las heridas, para calmar estas idas y venidas que no merecemos. Vuelve para traicionar al pasado, para reírme de él y presencies que aún no he muerto. Vuelve cada vez que puedas, siempre si es posible, y eso sí, no te vayas nunca.
Sería agradable que vuelvas, pero descuida, no te molestes en buscarme, estoy más perdido y vivo que nunca. Sin embargo, quiero que vuelvas, que atravieses cada lugar, que recuerdes cada momento, que descifres las palabras y que reinventes las noches y descubras los hechos, y que sientas unas ganas tremendas de volver para irte de nuevo. Pero ven, aquí te espero, lejos de ti y con una vida nueva. No hay prisa, pero vuelve. 
Y reafirmo mis deseos de querer que vuelvas, de que encuentres otra vez el camino, de que vuelvas a ser tú en este infierno que es el olvido. Vuelve con ganas de vivir, de ser, de nuevo, lo que eras, lo que fuiste, o mejor, lo que siempre has querido ser. 
No pretendo burlarme de tu regreso. De corazón, quiero que vuelvas. Que vuelvas a encontrarte, que veas que he cambiado, que el rencor no existe, que solo vive en tu cabeza. Pero vuelve. Sería bonito saber que has vuelto, porque me conoces y te conozco, y yo sé que amas este lugar tanto como yo. 
Si está en tus planes volver, solo recuerda que las cosas por aquí ya no son las mismas. Ya no existe la culpa, la desdicha, la melancolía ni el pesar. Por tal motivo, si decides regresar, no te sorprendas de lo bien que todo se ha adaptado a tu ausencia. Y es que todo avanza, la vida y el tiempo.
Espero que vuelvas para poder mostrarte, de nuevo, y espero no equivocarme, los caminos, los aposentos de nuestra historia que ya no he vuelto a visitar, y no por desgano, sino porque no recuerdo muy bien el trayecto de dichos lugares. Por eso vuelve, para que reconozcas los paisajes y los momentos, para ver si así me ayudas a recordar. Vuelve, del arrebato te fuiste dejando algunas cartas y algunos besos. Pero descuida, los he guardado bien y puedes llevártelos cuando gustes. Aunque para serte sincero, ya no recuerdo muy bien en dónde los he dejado. Pero vuelve, tal vez pueda encontrarlos.
¿Recuerdas aquel lugar donde solíamos pasar las tardes noches? Me temo que yo no, esta amnesia me ha afectado mucho desde que te fuiste. Por eso me gustaría que vuelvas, hay cosas que no recuerdo bien y la verdad, me está volviendo loco. Esperaré tu respuesta si te animas en volver. Pero antes debo confesarte algo, que si vuelves, quizás no vaya a reconocerte, pero no dudes que te recibiré con los brazos abiertos. 
Vuelve para recuperar la amistad que tuvimos, que no todo en esta vida es olvido e indiferencia. Que después del amor son los recuerdos los que quedan, y que todo lo escrito y lo vivido son etapas de la vida. Y que sepas que el humor con el que te recibo es la prueba de las veces que decíamos que al final nos reiríamos de todo esto.
Por eso vuelve, sin temores, sin el peso del desamor pues este corazón también fue tuyo. Y quédate, quédate y presencia este cambio en los paradigmas, esta revolución que tiene como motivo reciclar los sentimientos y renovar la sonrisa. Y comparte conmigo esta hermosa ideología que, principalmente, sirve para conservar la alegría y transformar la pena. Pero, lamento informarte, con el dolor más grande y con el amor que te tuve, que si vuelves, este corazón ya no volverá a ser tuyo.